Presuntamente el recién nacido fue asesinado dentro del reclusorio, de acuerdo con un comunicado de la asociación civil Reinserta. Además detalló que fue un interno quien dio aviso a las autoridades penitenciarias sobre el hallazgo del cuerpo.
El bebé tenía tres meses de nacido y había ingresado al penal como parte de una visita familiar.
De acuerdo con Saskia Niño de Rivera, presidenta de Reinserta, el menor presentaba una incisión en el abdomen, lo que “nos hace pensar que ese niño fue usado para ingresar droga al penal”, dijo en entrevista con Carlos Zúñiga en entrevista con Milenio Televisión.
Reinserta condenó la “incapacidad absoluta” del Gobierno de Puebla y autoridades penitenciarias para mantener el control en el penal de San Miguel.
Denunció que en dicho centro penitenciario existen irregularidades como el cobro de lista, el ingreso de mujeres sexoservidoras, la manufactura de droga y peleas de perros para apuestas.
“A los perros muertos, después de las peleas los sacan en bolsas de basura afuera del penal. Esta vez lo que se encontró en los botes de basura fue el cuerpo de un bebé de tres meses que fue asesinado al interior del penal cuando ingresó en una visita familiar”, dijo.
Reinserta reprobó la falta de espacios seguros dentro de estos para que las niñas y niños puedan convivir con sus familiares de forma segura.
“El penal de San Miguel, ubicado en la ciudad de Puebla es conocido por su autogobierno; tan sólo el pasado 6 de diciembre una PPL fue brutalmente asesinado y el 28 de diciembre se registró una riña entre internos”, puntualizó el organismo.
En tanto, las autoridades del penal procedieron a dar aviso a la Fiscalía General del Estado (FGE) para realizar las investigaciones correspondientes.