Alarma en París por la invasión de chinches en toda la ciudad. Cines, teatros, trenes y metros están plagados de estos pequeños parásitos chupasangre, autoridades locales pidieron ayuda al Gobierno federal.
Esto ha provocado que la alcaldesa de París, la socialista Ana Hidalgo (nacida en Cádiz), haya solicitado al Gobierno de Francia que este tema sea tratado como una cuestión de Estado, ya que preocupa lo difícil que está siendo controlar la plaga y el poco tiempo que queda para que arranquen los Juegos Olímpicos 2024.
«Estamos preocupados porque es una especie invasiva. Si no abordamos el problema desde la raíz, podemos resultar desbordados», explican desde el Ayuntamiento de París para que se busque una solución a la mayor brevedad posible.
Faltan justo 300 días para la inauguración de los Juegos Olímpicos y la plaga puede causar un serio daño de imagen.
Ante la solicitud, este vienes el gobierno francés anunció que lanzará una contraofensiva para combatir la plaga.
El ministro de Transporte, Clément Beaune, ha convocado para la semana que viene una reunión de crisis para tomar medidas después de haberse detectado chinches en asientos de la red de metro parisina –en concreto la línea 8– así como en convoyes de la SNCF, incluidos los trenes de alta velocidad (TGV).
Viajeros asqueados colgaron videos en redes sociales de estos insectos chupasangre, vistos en el metro de París, trenes de alta velocidad e incluso en el aeropuerto parisino Charles de Gaulle.
Los efectos de sus picaduras pueden durar alrededor de dos semanas, aunque no causen enfermedades y sea extraño tener algún tipo de alergia hacia ellos.
Hay que destacar que esta no es la primera plaga de chinches que afecta a Francia en los últimos años. En febrero de 2020 el Gobierno Francés lanzó una campaña para prevenir este problema y acabar con la presencia de estos insectos que han aparecido en el país galo después de más de 70 años sin su presencia. En concreto, se cree que los viajes internacionales y su resistencia a los insecticidas son los que han provocado su regreso, pero son solo dos hipótesis.
No obstante, la de los chinches no es la única plaga a la que han hecho frente en Francia en últimamente. Sobre todo en París, por su enorme densidad, en varias ocasiones han tenido que afrontar plagas de ratas que han sido todo un quebradero de cabeza para los regidores de la ciudad.