Los datos recopilados por el Departamento de Seguridad Civil (Defesa Civil) del Estado de Amazonas en Brasil, revelan una situación de sequía cada vez más crítica, con 40 de los 62 municipios en situación de emergencia. Afecta ya a 633 mil personas y 62 ciudades, según reportaron las autoridades locales.
La Amazonia está experimentando una estación seca más larga y dura de lo normal, con los cauces de los ríos en niveles históricamente bajos, muy cerca de los peores registrados en 20103.
Se cree que esto se debe en particular al aumento de la temperatura del Océano Atlántico y al fenómeno climático de El Niño, que está calentando el continente sudamericano y creando un clima más seco en la Amazonia.
La sequía mantiene a 59 ciudades en situación de emergencia, a una en alerta y otras 2 en proceso de normalización, con 151 mil familias afectadas (633 mil personas).
En la comunidad de Barro Alto y en la zona conocida como Poção, el olor a pescado podrido es casi insoportable con miles de peces muertos que se mezclan con el lodo y son devorados por los buitres.
Con los bloques de lodo que se forman, los barqueros tienen que ser hábiles para no quedarse atascados en el barro.
Los residentes dicen que han muerto muchos más peces, pero como ha llovido en los últimos días los animales muertos han desaparecido.
En Paraná do Barroso, donde el rio Negro confluye con el Solimões, un banco de arena ha cerrado el paso a las embarcaciones, con apenas una profundidad de escasos treinta centímetros en algunos tramos.