Griselda Blanco fue la colombiana más temida y peligrosa del continente, quien forjó el camino para que otros delincuentes pudieran crecer el imperio del narcotráfico en Colombia.
La serie hecho por la empresa de streaming “Netflix”, nos lleva con Griselda, interpretada por la actriz colombiana, Sofía Vergara, quien interpreta la vida de esta peligrosa mujer y cómo, finalmente, fue asesinada.
Nacida en 1943, en Colombia, con una infancia sumida en la pobreza. Por ello, comenzó a delinquir desde los 11 años; siendo su primer delito un secuestro de un niño de altos recursos que fue asesinado porque su familia no pagó el rescate. Así, la mujer habría crecido en el peor de los ambientes, donde también se cree que se prostituía y robaba.
A los 21 años conoció a Carlos Trujillo, un hombre que falsificaba documentos y que la convenció de irse a Nueva York, donde se casaron y tuvieron tres hijos llamados Uber, Dixon y Osvaldo.
Y tras supuestamente aburrirse de su esposo, Griselda, ordenó que lo asesinaran mientras estaban en el proceso de divorcio.
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— Netflix (@netflix) September 21, 2023
Su segunda esposo, fue Antonio Bravo, quien además, la introdujo al mundo del narcotráfico y juntos, elaboraron un minucioso sistema para poder transportar cocaína desde Colombia a Estados Unidos, utilizando la ropa interior de las mujeres.
Ambos se fueron a vivir a Miami, una ciudad que en la década de los 70’s estaba descontrolada y Griselda y su esposo aprovecharon el sistema, forjando ganancias de hasta 80 millones de dólares por mes. Los mismos lideres narcos le temían y, según los expedientes del caso, es culpable de al menos 200 asesinatos. En 1975 se la acusó por narcotráfico, pero en ese momento Griselda escapó a Colombia y evadió los cargos en los Estados Unidos.
Cuando la mafiosa llegó a Medellín, Colombia, Pablo Escobar, todavía era joven, por lo que Griselda continuó dominando en el mundo del narco. Su segundo asesinato a fue a su segundo esposo, del cual sospechaba que le había robado dinero, por lo que terminó matándolo con un balazo. Mismo caso con su tercer marido, Darío Sepúlveda.
Cuando Blanco decide mudarse a California, fue arrestada por los cargos que enfrentaba desde hace una década y declarada culpable; fue sentenciada a 15 años de prisión, pero como pasa en el narcotráfico, continuó manejando su imperio desde la cárcel.
Se declaró culpable, para que le disminuyeran la sentencia, y en el año 2004 fue liberada y deportada a Colombia, donde se habría desligado ahora de su anterior vida.
En el año 2012, mientras salía de una cafetería, un hombre en motocicleta la asesinó con un disparo.