Los estadounidenses eligen este martes si convierten a Kamala Harris en la primera mujer presidenta o dan las llaves de la Casa Blanca por segunda vez a Donald Trump, en medio de una gran incertidumbre que tiene al mundo en vilo.
La reñida carrera entre la vicepresidenta demócrata, de 60 años, y el expresidente republicano, de 78, está a punto de finalizar pero se ignora si se tardará horas o días en conocer quién ganó.
Más de 82 millones de personas ya votaron anticipadamente y se suceden las filas en los colegios electorales en este día histórico.
No hay favorito. Están empatados en las encuestas en los siete estados que decidirán el vencedor: Pensilvania, Míchigan, Wisconsin, Carolina del Norte, Georgia, Arizona y Nevada. El resto suelen dividirse entre los tradicionalmente demócratas o republicanos. Este martes ambos candidatos tomaron la palabra.
“Me siento muy confiado” en la victoria, dijo Trump tras votar en Florida.
“Si pierdo unas elecciones, si son unas elecciones justas, sería el primero en reconocerlo. Hasta ahora creo que han sido justas”, añadió, pese a acusar últimamente a los demócratas de “hacer trampas”.
Antes difundió un video de un minuto con imágenes de una bandera estadounidense destrozada, migrantes cruzando la frontera y delincuentes armados en contraste con otras de mineros o policías.
Harris llamó a salir a votar.
“Hoy votamos porque amamos a nuestro país y creemos en la promesa de Estados Unidos”, escribió en las redes sociales.