Y fue mujer. Y fue Karla Planter Pérez.
La Universidad de Guadalajara, la casa de estudios pública más grande del Estado, y la tercera de mejor prestigio nacional, tiene por primera vez en su historia una Rectora General.
Y vaya que la historia de la UdeG no es corta. Fue fundada originalmente hace 232 años como la Real Universidad de Guadalajara, y refundada como Universidad de Guadalajara hace 99 años, el 12 de octubre de 1925. Y nunca una mujer había dirigido los destinos de tan gloriosa institución.
No fue una sorpresa que a la rectoría general llegara una mujer. Primero porque tres de los cinco aspirantes eran del sexo femenino, y segundo y más importante, porque era el momento justo para que una mujer se convirtiera en la principal directiva de la casa de estudios. Es el tiempo que vivimos, sin lugar a dudas, el momento más importante para el género en Jalisco y México.
Que sea Karla Planter la nueva rectora general es también un reconocimiento a las leonas negras de ayer y de hoy. Las estadísticas de 2022 señalan que del total del alumnado de la UdeG, 53.2 por ciento fueron mujeres. Nada más y nada menos que 73 mil 635 alumnas en los diferentes sistemas y planteles, una cifra obviamente superior a la de los hombres (46.8 por ciento), que representó en 2022 una cifra de 64 mil 735 alumnos.
La Universidad de Guadalajara forjó la inclusión a lo largo de décadas, gracias al esfuerzo de todas las mujeres que han pasado por sus aulas como alumnas y profesores, y que luego comenzaron a ocupar los cargos directivos para contribuir en igualdad al engrandecimiento de la institución.
En la Universidad de Guadalajara, como en buena parte de la sociedad, ya no hay marcha atrás. La UdeG es y seguirá siendo de ellas y de ellos. Y ellas merecen estar en lo más alto.