El gobierno de Claudia Sheinbaum sorprendió el pasado viernes con el “Operativo Enjambre” aplicado en el Estado de México, con saldo de siete detenidos, como la alcaldesa de Amanalco, María Elena “N”, así como los directores de Seguridad Pública y subdirectores de ocho municipios ubicados en la Zona Sur del Valle de México. El dispositivo pretendía capturar otra cantidad similar, pero quedó en eso.
La autoridad presume las órdenes de aprehensión para evitar que los funcionarios queden libres por fallas en el proceso, como ocurrió con el famoso “michoacanazo” aplicado en el arranque de la administración federal del panista Felipe Calderón, cuando se inició una fallida guerra contra la delincuencia organizada y el narcotráfico.
El operativo del Estado de México fue encabezado por el secretario de Seguridad del gobierno federal, Omar García Harfuch. El “michoacanazo” lo lideró el secretario Genaro García Luna por allá en mayo de 2007, cuando detuvieron a 11 presidentes municipales, 16 colaboradores del entonces gobernador Leonel Godoy y hasta un juez estatal. Al final sumaron 38 imputados por su presunta relación con la delincuencia organizada, pero fueron quedando libres de uno por uno.
También destacan los tiempos. El “Operativo Enjambre” se lanzó a dos meses del arranque de la administración de Claudia Sheinbaum. Y el “michoacanazo” comenzó seis meses después del inicio de la gestión de Felipe Calderón.
Otra arista: El “Operativo Enjambre” nace en medio de las críticas contra los gobiernos morenistas por sus vínculos o por la tolerancia con algunos cárteles de la droga; incluso, por la crisis desatada por los “Chapitos” y “El Mayo” Zambada. Por su parte, el “michoacanazo” se aplicó en un periodo en el que Felipe Calderón requería de legitimar su administración, tras el presunto fraude en la elección del 2006.
Con menos tiempo en funciones, la administración de Claudia Sheinbaum está iniciando con el “Operativo Enjambre”. Argumentan que las órdenes de aprehensión se sustentan con distintos datos de prueba, que fueron entregados por la autoridad ministerial a un juez, quien finalmente libró las órdenes de aprehensión por delitos como extorsión, secuestro exprés y homicidio contra diversos funcionarios de los municipios de Amanalco, Santo Tomás, Tonatico, Chicoloapan, Ixtapaluca, Tejupilco, Naucalpan, Coacalco, Jilotzingo y Texcaltitlán, en una región donde operan cuatro grupos delictivos con alcance regional y nacional.
¿Cuáles son los riesgos de que los detenidos sean liberados y que todo sea un show? A diferencia del “michoacanazo”, sí hay más riesgos. El primero: por fallas en el proceso parecidas a las de 2007, sobre todo por la premura. El segundo: por la relación de jueces o magistrados con el crimen organizado. Y el tercero: que el conflicto entre Morena con el Poder Judicial salpique en este caso.
Hay que tener el tema en la mira durante este sexenio. Y estar atentos a los Estados a los que se extenderá el “Operativo Enjambre”.