Si tuviera que resumir todo lo vivido en 2024 en tres palabras, estas serían: resiliencia, cambio y adaptación. Comenzamos el año en un periodo de precampaña, recorriendo las calles para reafirmar el compromiso de nuestro Movimiento con la ciudadanía. Con el paso de los días, el ritmo de trabajo se intensificó y llegamos al arranque de campaña con un objetivo claro: Por Jalisco, siempre mejores.
Por Jalisco, siempre mejores, significa mostrarle a la gente que vamos por buen camino y que lo mejor está por venir. Es trabajar para contar con un sistema educativo y de salud que sea referente nacional. Es apostar por una movilidad de calidad, conectando la ciudad de tal forma que las personas puedan dedicar más tiempo a sus seres queridos y menos al tráfico. Es impulsar la tecnología y profesionalizar a nuestra juventud en sectores estratégicos como la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, asegurándoles empleos bien remunerados y un futuro prometedor.
En Movimiento Ciudadano tenemos una ruta clara para convertir a Jalisco en un oasis de desarrollo y resultados para nuestra gente. Sabemos que nos debemos a todas aquellas personas que, con su esfuerzo diario, construyen un futuro más próspero e incluyente. Durante la campaña, nuestra promesa fue caminar juntos, construir desde la cercanía, cuidar lo que tenemos y completar lo que aún nos falta. Hoy, como integrante de este movimiento, agradezco la confianza que nos brindaron las y los jaliscienses, una confianza que nos permitió alcanzar un logro histórico: tener al Gobernador más votado en la historia de Jalisco, con un millón 631 mil 929 votos.
A pesar de los meses de tensión provocados por la incapacidad de la alianza opositora para reconocer su derrota en el Estado, Pablo Lemus se reafirmó como el legítimo ganador de los comicios del 2 de junio. Este triunfo recuerda que Jalisco se distingue por su pluralidad, diálogo y respeto.
Por otro lado, este año también marcó un cambio de paradigma en el ejercicio del poder. Por primera vez, tendremos una Presidenta, y tanto en Guadalajara como en México, seremos parte de este momento histórico. Para las feministas, como quien escribe estas líneas, es un logro profundamente anhelado. Representa una bocanada de esperanza y un poderoso llamado a la sororidad generacional. Las mujeres debemos trabajar en unidad para construir un México donde las niñas que hoy nos observan puedan crecer con seguridad, sabiendo que existe un Estado y una sociedad que las protege, las impulsa y cree en su potencial.
En un contexto de cambio, la adaptación ha sido y seguirá siendo uno de los mayores retos para la oposición. La nueva configuración del poder a nivel nacional, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, exige que las y los políticos seamos íntegros, creativos e innovadores. Debemos representar las causas de quienes nos han dado su confianza y construir puentes sólidos de comunicación que permitan impulsar iniciativas con un impacto real en la vida diaria de las personas. En la Bancada Naranja, hemos demostrado que esto es posible.
Gracias al diálogo, la construcción de acuerdos y la perseverancia, logramos aprobar la Ley Silla, que obliga a los empleadores a proporcionar sillas para que las y los trabajadores puedan sentarse durante su jornada laboral. Es inhumano que alguien pase más de ocho horas de pie, afectando su circulación sanguínea y bienestar físico. De la misma forma, seguiremos trabajando en la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales, porque queremos que las y los mexicanos dispongan de más tiempo para la recreación, el ejercicio, el ocio y el descanso, elementos esenciales para la salud mental y una mejor calidad de vida.
Recibimos este nuevo año con grandes retos, pero con la certeza de que no existen mayorías infinitas ni minorías eternas. Nuestra capacidad de resiliencia y adaptación será clave para forjar el futuro. Tengan la seguridad de que seguiremos trabajando por un México de paz, que proteja a las y los más vulnerables y sea sensible ante las desigualdades.