El FBI avanzó este jueves en la investigación del mortífero ataque de un veterano del Ejército estadounidense que “inspirado” en el grupo Estado Islámico, embistió con una camioneta a la multitud que celebraba la llegada del Año Nuevo en Nueva Orleans.
El ataque dejó 15 muertos y más de 30 heridos. El sospechoso, identificado como Shamsud Din Jabbar, un estadounidense de 42 años residente en Texas, murió en un intercambio de disparos con la policía.
Sin dar mayores detalles, las autoridades dijeron que están en la búsqueda de cómplices.
El ataque ocurrió en Bourbon Street, en el famoso Barrio Francés de Nueva Orleans, en el sur de Estados Unidos, el pasado 1 de enero.
De acuerdo a las investigaciones, horas antes del ataque, Jabbar publicó videos en los que afirmaba actuar “inspirado” en el grupo Estado Islámico, indicó el miércoles el presidente Joe Biden.
Anne Kirkpatrick, superintendenta de policía, describió a Jabbar como un “terrorista” mientras el FBI dijo que “una bandera de EI fue hallada en el vehículo”. “Estaba decidido a provocar la masacre y el daño que causó”, sostuvo Kirkpatrick en una rueda de prensa.
Entre los fallecidos figura Nikyra Cheyenne Dedeaux, una estudiante de 18 años que había venido a Nueva Orleans a celebrar el Año Nuevo con un amigo y un primo, según la prensa.
También fallecieron Reggie Hunter, un administrador de 37 años de la cercana Baton Rouge, padre de dos hijos, así como Tiger Bech, un exjugador de fútbol americano de la Universidad de Princeton, informó The New York Times.
El Pentágono dijo que Jabbar sirvió en el Ejército como especialista en recursos humanos e informática, entre 2007 y 2015 y que fue reservista hasta 2020.
Fue desplegado en Afganistán desde febrero de 2009 hasta enero de 2010, según un portavoz del ejército, que añadió que tenía el rango de sargento primero al final de su servicio.
Según los antecedentes penales publicados por el New York Times, Jabbar había sido acusado de dos delitos menores: uno en 2002 por robo y otro en 2005 por conducir con un permiso sin validez.
Estuvo casado dos veces, según el periódico, y su segundo matrimonio terminó en divorcio en 2022, cuando detalló sus problemas financieros en un correo electrónico al abogado de su esposa.
El ataque ocurrió horas antes de que se disputara en la ciudad un partido de fútbol americano de la liga universitaria, el Sugar Bowl, que fue aplazado 24 horas, hasta este jueves.