Nuevos hechos de violencia se registraron durante este primer fin de semana en Culiacán y Elota, Sinaloa.
En la zona sur de Culiacán, específicamente en las inmediaciones de la central de abastos, se registró un intercambio de disparos que dejó como saldo preliminar dos personas fallecidas. De forma simultánea, en la sindicatura de Villa Juárez, Navolato, la base de la Policía Estatal fue blanco de un ataque armado en el que se utilizaron rifles automáticos; afortunadamente, no se reportaron lesionados.
El ataque a las instalaciones de la corporación estatal ocurrió la tarde del sábado, en la calle José María Morelos y Pavón de la colonia Santa Natalia. Individuos fuertemente armados dispararon contra el edificio, generando la inmediata activación de protocolos de emergencia por parte del personal de la Estatal Preventiva.
Tras la agresión, los elementos de la Policía Estatal solicitaron apoyo a otras corporaciones y a las fuerzas federales, quienes desplegaron operativos de búsqueda para localizar a los responsables. Hasta el momento, no se han dado a conocer resultados oficiales de estas acciones.
En cuanto al tiroteo ocurrido cerca de la central de abastos y la colonia Nueva Galicia, las primeras investigaciones apuntan a que las dos personas fallecidas aún no han sido identificadas. Las autoridades locales tampoco han emitido información detallada sobre los operativos implementados tras estos hechos.
Durante la madrugada del sábado 4 de enero, varias comunidades de la sindicatura del Espinal, en el municipio de Elota, fueron escenario de un enfrentamiento entre presuntos grupos armados. Como consecuencia, se reportaron vehículos calcinados y abandonados tanto en la Carretera Internacional México 15 como en las calles de la zona. Hasta ahora, no se ha confirmado la existencia de víctimas mortales o heridos.
Aunque las autoridades estatales señalaron en una conferencia que no cuentan con reportes oficiales de estos sucesos, habitantes de la región difundieron en redes sociales detalles del enfrentamiento. Según testimonios, los enfrentamientos se extendieron desde el Ejido 26 de Enero hasta el crucero de la carretera que conecta con el municipio de Cosalá, prolongándose hasta el amanecer.
En el lugar quedaron evidencias del conflicto, como vehículos tipo pick-up y SUV calcinados con impactos de bala, además de rastros de sangre en diversas áreas. Sin embargo, no se ha precisado la cantidad de personas afectadas.