El asteroide 2024 YR4 ha sido objeto de atención; chocaría con la Tierra en 2032
La agencia espaciales de los Estados Unidos (NASA) y la Agencia Espacial Europea (ESA) han intensificado el monitoreo del asteroide 2024 YR4, un objeto de entre 40 y 90 metros de diámetro que podría impactar la Tierra el 22 de diciembre de 2032.
Habían dado a conocer ayer que la probabilidad de colisión con la Tierra era del 1.6%, sin embargo, según el Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA, actualmente existe una probabilidad actual del 1.9 % de que este asteroide de gran tamaño colisione en la Tierra en la próxima década, por lo que podría ser una amenaza potencial.
No obstante, estas estimaciones fluctúan a medida que hay más datos disponibles, lo que ha activado los protocolos de observación de la Oficina de Defensa Planetaria.
El asteroide ha sido clasificado en el nivel 3 de la Escala de Torino, lo que significa que merece atención por parte de los astrónomos y el público debido a la posibilidad de un impacto que podría causar.
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) y la Agencia Espacial Europea (ESA), desde su descubrimiento, han estado monitorizando su trayectoria. Se espera que observaciones adicionales refinen estas predicciones, y la expectativa es que la probabilidad de impacto disminuya a cero conforme pase el tiempo.
Señalan que, en caso de que la probabilidad de impacto no disminuya, se esperan medidas de “defensa planetaria”, lo que podría incluiría la posibilidad de misiones espaciales para desviar el asteroide desde el espacio.
En caso de que la colisión se lleve a cabo en la fecha esperada, reportan que las zonas de mayor riesgo son el océano Pacífico oriental, el norte de Sudamérica, el Atlántico, África, el Mar Arábigo y el sur de Asia. La explosión y expansión de la misma, podría causar daños significativos en áreas pobladas.
Se llegó a destacar que si pasara, un asteroide de este tamaño podría causar daños significativos en el área de impacto, similar a eventos históricos como el de Tunguska en 1908.
Tunguska es uno de los fenómenos más intrigantes y estudiados en la historia de la ciencia, principalmente en la astrofísica y la geología. Ocurrió un 30 de junio del año de 1908, cerca del río Podkamennaya Tunguska, en la región de Siberia, en Rusia.
Fue una explosión causada por un objeto de entre 50 y 190 metros de diámetro, probablemente causada por un cometa o un meteorito.
La explosión que liberó dicho impacto, fue de entre 10 y 15 megatones de TNT, aproximadamente mil veces más que la bomba atómica de Hiroshima. Donde aproximadamente 2 mil 150 kilómetros cuadrados de bosque fueron arrasados, y las ondas de choque se sintieron en un radio de hasta mil kilómetros, rompiendo ventanas y derribando personas que se atravesaron en su paso.
Además, durante varias noches, los cielos de Europa y Asia se iluminaron como si fuera de día por a la dispersión de partículas en la atmósfera. Así como describieron un calor intenso y un sonido ensordecedor que llegó después del impacto.