Maurice Obstfeld, economista, advirtió que algunos países podrían buscar reducir su dependencia del mercado estadounidense si las tarifas continúan aumentando
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que impondrá “aranceles recíprocos” a países que apliquen impuestos a productos estadounidenses. Durante un evento en la Casa Blanca, señaló que su administración buscará igualar las tarifas impuestas a bienes de Estados Unidos con aquellas aplicadas por otros países a productos importados desde territorio estadounidense.
Trump afirmó que los aliados comerciales del país suelen aplicar medidas “más severas” que las de sus rivales, y mencionó específicamente a la Unión Europea como un ejemplo de políticas comerciales que considera desventajosas. También reconoció que esta medida podría generar un aumento en los precios, aunque expresó su expectativa de que estos disminuyan con el tiempo.
El mandatario instruyó a sus equipos a realizar una revisión de las disparidades comerciales entre Estados Unidos y otros países con el fin de aplicar aranceles “recíprocos y personalizados”. Un funcionario de la Casa Blanca indicó que este proceso podría durar semanas o meses. Peter Navarro, asesor comercial de Trump, explicó que el país mantiene un déficit comercial de más de un billón de dólares debido a barreras arancelarias y no arancelarias impuestas por otros mercados.
A través de su plataforma Truth Social, Trump celebró la decisión y reiteró su lema de campaña “Hagamos que Estados Unidos sea grande otra vez”. Explicó que la política busca equilibrar los aranceles de importación y exportación, lo que podría afectar a países emergentes como Brasil y Tailandia, donde se aplican tarifas altas para proteger economías locales. También mencionó que India impone un arancel del 25% a los automóviles estadounidenses, lo que justificaría una medida similar por parte de su gobierno.