Cuando hablamos de derechos sociales, solemos referirnos a la educación, la cultura, una vida libre de violencia y más recientemente, a la vivienda. Sin embargo, hay un derecho que, si bien no es el origen de estos, resulta fundamental para su pleno ejercicio en el contexto actual: el derecho a la ciudad.
Este concepto comenzó a tomar forma en el I Foro Social Mundial de 2001, celebrado en Porto Alegre, Brasil. En aquel encuentro, movimientos populares, organizaciones no gubernamentales, asociaciones profesionales y redes nacionales e internacionales de la sociedad civil iniciaron una profunda reflexión sobre la naturaleza de las ciudades. Más allá de concebirlas únicamente como centros económicos y comerciales, se propuso repensarlas desde una perspectiva de justicia social.
A partir de estas discusiones surgió la Carta por el Derecho a la Ciudad, un documento que establece los principios bajo los cuales deben diseñarse las ciudades, considerando su función social. Esta carta representa un mecanismo de protección para las poblaciones urbanas, especialmente en regiones con procesos de urbanización acelerada.
En México, el periodo de mayor intensidad en la expansión urbana se dio entre las décadas de 1940 y 1980. En respuesta a esta transformación, las políticas públicas adoptadas fueron mayormente reactivas, enfocadas en atender problemas específicos conforme surgían o se intensificaban. No obstante, según el informe Metrópolis de México 2020, elaborado por la SEDATU, CONAPO e INEGI, se pronostica que el proceso de urbanización en el país tenga una tendencia de desaceleración. Esta nueva realidad brinda una oportunidad para que el Estado implemente instrumentos de gobernanza multinivel que permitan abordar los crecientes desafíos de segregación social y pobreza urbana.
El ejercicio del derecho a la ciudad exige la colaboración activa entre ciudadanía, iniciativa privada y Estado para coproducir políticas locales que impulsen la construcción de ciudades progresistas, basadas en derechos, libertades, inversión e innovación.
Este proceso implica necesariamente el desarrollo de innovación social en las políticas urbanas, no solo en términos de nuevas soluciones, sino también en la manera de identificar problemáticas. Asimismo, conlleva el empoderamiento social, fortaleciendo vínculos y redes comunitarias, y promoviendo iniciativas replicables y escalables, que sirvan de modelo para otros territorios.
En este contexto, es fundamental reconocer el papel de los movimientos sociales, que generan nuevas formas de ciudadanía y nos invitan a repensar la ciudad y el espacio público como un bien común. Un claro ejemplo de esto es la forma en que los jóvenes ejercen su ciudadanía a través de la apropiación del espacio y la demanda de derechos. En Jalisco, el movimiento ciclista visibilizó la bicicleta como medio de transporte, dando inicio a la construcción de ciclovías en Guadalajara, Zapopan y Tlajomulco. A partir del 2009 las administraciones municipales y estatales han hecho de las ciclovías uno de los ejes principales de la movilidad en la ciudad.
Garantizar el derecho a la ciudad implica cambiar las dinámicas urbanas mediante estrategias inclusivas y sostenibles, donde la participación colectiva sea el motor de un desarrollo más justo y equitativo. Por ello, desde la Comisión de Zonas Metropolitanas de la Cámara de Diputados, llevaremos a cabo el foro Metrópoli Activa: un llamado a la acción, en el que abordaremos tres de los principales desafíos de las ciudades mexicanas: movilidad, gestión hídrica y gobernanza metropolitana para la construcción de vivienda social.
En este foro, contaremos con la participación de académicos del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), presidentes y presidentas municipales de las zonas metropolitanas de Guadalajara, diputadas y diputados federales, así como funcionarios públicos de los distintos órdenes de gobierno. Juntos, analizaremos las complejidades de estos retos, los avances logrados y las posibles vías de solución.
La cita es el 24 de febrero a las 10:00 a.m. en el Auditorio D2 del ITESO. Para asistir, les invitamos a enviarnos su nombre al correo [email protected]
Los esperamos para construir juntos el futuro de nuestras ciudades.