Luis Rubiales recibe sentencia por beso forzado a Jenni Hermoso
Junto a Rubiales, también fueron juzgados por coacciones el exseleccionador Jorge Vilda y los exdirigentes de la RFEF, Rubén Rivera y Albert Luque
El exjefe del fútbol español, Luis Rubiales, fue declarado culpable de agresión sexual y condenado a pagar una multa de 10.800 euros (aproximadamente 11.300 dólares) por besar sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso durante la premiación del Mundial femenino de 2023. La sentencia, emitida por el juez José Manuel Fernández-Prieto, también impone a Rubiales la prohibición de acercarse a Hermoso a menos de 200 metros o comunicarse con ella durante un año.
El magistrado determinó que Rubiales actuó “de forma sorpresiva” y que su conducta atentó contra la libertad sexual de Hermoso. En la sentencia, el juez subrayó que un beso en la boca “no es la forma normal de saludar a las personas con quienes no se mantiene una relación de afectividad“. Sin embargo, el tribunal absolvió a Rubiales del delito de coacciones, al no encontrar pruebas suficientes de intimidación o violencia.
La Fiscalía había solicitado una pena de dos años y medio de prisión: un año por agresión sexual y un año y medio por coacciones, argumentando que Hermoso recibió presiones para minimizar el incidente. No obstante, el juez consideró que la agresión sexual en este caso fue de “menor intensidad” y que no hubo violencia que sustentara el cargo de coacciones.
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Tras conocerse el fallo, la ministra española de Igualdad, Ana Redondo, destacó en la red social X que “cuando no hay consentimiento hay agresión y eso es lo que certifica el juez en esta sentencia“. Asimismo, el sindicato Asociación de Futbolistas Españoles calificó la decisión como “histórica” y un precedente en la justicia española.
Durante el juicio, Hermoso reiteró que el beso fue no consentido y que se sintió “poco respetada”. También relató que recibió múltiples solicitudes por parte de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para restar importancia al hecho. Rubiales, por su parte, defendió que Hermoso accedió al beso y aseguró que su comportamiento no fue el adecuado, aunque argumentó que se dejó llevar por la emoción del momento.
El caso de Rubiales se convirtió en un símbolo de la lucha contra el sexismo en el deporte y dio origen al movimiento #SeAcabó, en apoyo a las jugadoras. Además, el exdirigente enfrenta otra investigación judicial por presunta corrupción y contratos irregulares durante su gestión en la RFEF, incluyendo el acuerdo que llevó la Supercopa de España a Arabia Saudita.
