El presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió este lunes que la paz no puede pasar por una “capitulación” de Ucrania, pero cree que se puede emprender “un camino” con su homólogo estadounidense Donald Trump para poner fin a la guerra en el país.
“Después de hablar con el presidente Trump estoy convencido de que hay un camino a seguir”, afirmó Macron en una rueda de prensa conjunta.
Pero insistió en la necesidad de ofrecer “garantías de seguridad” para evitar que el presidente ruso Vladimir Putin vuelva a atacar.
“Queremos un acuerdo rápido, pero no un acuerdo frágil”, afirmó el jefe de Estado francés.
Antes Donald Trump se jactó ante los periodistas de su relación “especial” con Macron y aseguró que podría poner fin a las hostilidades bélicas en “unas semanas”.
El presidente estadounidense consideró también que la firma de un acuerdo con Ucrania para tener acceso a los minerales de este país está “muy cerca”. Incluso mencionó la posibilidad de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, vaya a la Casa Blanca para ratificarlo “esta semana o la próxima”.
Para él es una forma de que Estados Unidos recupere la millonaria asistencia desembolsada para ayudar a Kiev desde la invasión rusa hace justo tres años, en febrero de 2022.
El republicano cuenta sobre todo con su diálogo con Putin para detener los combates. Este último declaró el lunes que los europeos podrían “participar” en el proceso de resolución del conflicto.
“Los europeos están dispuestos a llegar hasta el envío de tropas” a Ucrania para verificar que “se respete la paz”, afirmó Emmanuel Macron. Y añadió que Europa está dispuesta a “reforzar” su defensa.
Pero Trump respondió con evasivas cuando se le preguntó si Washington ofrecería garantías de seguridad a estos soldados.
Macron y Trump intercambiaron algunas bromas y cumplidos, en un tono bastante distendido.
También se dieron fuertes apretones de manos, lo que se ha convertido en una especie de sello distintivo de su relación, como ya hacían durante el primer mandato de Donald Trump (2017-2021).
Pero detrás de esta cordialidad persisten grandes divergencias sobre Ucrania.
Delante de Trump, el presidente francés calificó a Rusia de “agresor”. El magnate republicano insiste, por el contrario, en poner a ambos países al mismo nivel, cuando no responsabiliza a Volodimir Zelenski, como hizo recientemente.
Información de AFP