Inició el desfile de directores técnicos en la LigaMX. Ya se nos hacía muy raro que pasada la mitad de la campaña no hubiera timoneles cesados, y es que como la mediocridad de la Liga está a la orden del día, pues los dirigentes se la llevaban muy tranquila, pero sólo era cosa que alguien tomara la iniciativa y los demás como borregos, adoptaran ese camino, el del despeñadero.
La primera directiva que tomó la determinación fue la de Pumas de Universidad Nacional Autónoma de México, que decidió echar al argentino Lema del cargo, y es que pese a sacar agua de las piedras desde la temporada pasada y también tras la salida de su mejor hombre, el “Chino” Huerta, los felinos se vinieron abajo en caída libre y no soportaron más la ola de críticas sobre el timonel por parte de la afición y de los medios de comunicación. Es cierto que al parecer, los jugadores tampoco demostraron un gran respaldo al estratega, sin embargo, la salida del entrenador no cambió mucho las cosas pues ya con técnico interino a la espera de la llegada de Efraín Juárez, volvieron a perder.
Y acá viene lo bueno: antes del partido ante Pumas y tras el despido del cuerpo directivo español del Guadalajara, el dueño del conjunto rojiblanco despachó también a su director técnico Oscar García, quien de paso y como lo había dicho semanas atrás, nunca debió haber llegado al Rebaño pues sólo le hizo perder tiempo al equipo en la búsqueda de un verdadero proyecto deportivo, pero no voy a reprocharle esta decisión al buen Amaury, quien de buenas intenciones no ha parado, aunque pésimamente asesorado para tomarlas. Pero ahora le aplaudo, pues reconocer los errores es de sabios y hoy ha tomado la mejor determinación para el equipo: deshacerse de ese mentiroso, irrespetuoso y agresivo personaje en el banquillo.
En la Sultana del Norte también hace aire y no se quisieron quedar atrás; los Tigres despidieron sin más ni más a Veljko Paunovic, quien a pesar de haber ganado su partido de esta jornada como visitante y tener a los felinos en el tercer lugar de la tabla general, sólo debajo de León y América, lo corrieron y como dicen allá, se la “bañaron” dejando muestra total que ese conjunto norteño está secuestrado por un grupo de jugadores que si bien ya no pueden ejercer su poder desde la cancha como jugadores, ahora lo harán como técnico, y es que resulta que su nuevo y flamante entrenador será Guido Pizarro, quien hasta hace unas horas era jugador y capitán de la escuadra de la U. ¿Habían visto semejante control y desfachatez de los jugadores en un equipo?…