El talento heredado

Múltiples familias se han consolidado en el cariño de México dentro del mundo del espectáculo y el entretenimiento y si pensamos en alguna dinastía que además de estar en el ojo público, todos son la cara del mismo progenitor, no dudamos ni dos veces en hacer mención de “Los Derbez”.

El reconocimiento al destacado comediante, actor y productor mexicano le ha valido los años de experiencia y sobre todo trabajo, posicionando en ocasiones a nuestro país, a nivel internacional, o incluso en el anhelado Hollywood.

Algo que muchos entrevén en el apellido Derbez, no es precisamente el talento de sus hijos, mismos que como si fuese chiste, cada uno tuvo su propia madre para que no se pelearan por lo cual, desde Aislinn, José Eduardo, Vadhir y la propia Aitana, cada uno ha obtenido sus características propias.

Sin embargo, los pesos culturales y sociales que siempre se otorgan a los descendientes de familias sean de actores, doctores o ingenieros, sin importar los oficios, las expectativas siempre están al alza al comparar el desempeño de los unos con los otros.

Los varones Derbez se encuentran construyendo su propio camino, o cavando su propia tumba, con el lanzamiento de un proyecto individual denominado “Par de Ideotas”, sin embargo, la importancia de construir los propios cimientos de las carreras, es una tarea que la vida no ha puesto en negociación, pues la admiración y el cariño del público no se hereda.