Las autoridades recomiendan a los productores informarse sobre buenas prácticas de alimentación y considerar alternativas seguras que garanticen la salud del ganado y la calidad de la carne
En Tabasco, al menos 1,500 cabezas de ganado murieron en los últimos días debido a una presunta intoxicación con pollinaza, un subproducto de los residuos de aves de engorda que se emplea en la alimentación del ganado.
Ante esta situación, la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa) ha reforzado la vigilancia zoosanitaria en Veracruz, implementando medidas en al menos 47 municipios, desde Alvarado hasta Las Choapas.
Sedarpa exhortó a los ganaderos a evitar el uso de pollinaza para prevenir posibles intoxicaciones y reducir el riesgo de pérdidas económicas. También recomendó a la población adquirir carne únicamente en establecimientos certificados por las autoridades sanitarias, con el fin de garantizar la calidad del producto y evitar riesgos para la salud.
La pollinaza es utilizada en la alimentación del ganado debido a su bajo costo y alto contenido proteico. Sin embargo, si no se maneja adecuadamente, puede contener bacterias y hongos que afectan la salud de los animales y, en consecuencia, la seguridad de los consumidores.
El Gobierno de Veracruz informó que trabaja en coordinación con ayuntamientos, productores, engordadores y comercializadores para reforzar los controles sanitarios. El objetivo es generar confianza entre los consumidores, mejorar los precios de venta y ampliar oportunidades en mercados nacionales e internacionales.
Las autoridades recomiendan a los productores informarse sobre buenas prácticas de alimentación y considerar alternativas seguras que garanticen la salud del ganado y la calidad de la carne. Asimismo, señalaron que la aplicación de medidas preventivas y un adecuado control sanitario ayudarán a evitar incidentes como el ocurrido en Tabasco.