El sismo de magnitud 4.8 que se registró la noche del 15 de abril en Jalisco provocó desprendimientos de tierra y derrumbes parciales en el Volcán de Colima.
La noche del martes se registró un movimiento sísmico en el municipio de Zapotiltic, Jalisco, cuyo epicentro se ubicó en las cercanías de la localidad de Atenquique, en el municipio de Tuxpan. A raíz del temblor, comenzaron a difundirse en redes sociales diversas imágenes y grabaciones que mostraban los efectos del fenómeno.
Las primeras inspecciones en las zonas aledañas al epicentro revelaron daños materiales, particularmente en comunidades como Los Mazos, donde se reportaron afectaciones a una iglesia local. Asimismo, en El Poblado, también en Tuxpan, se identificaron grietas considerables y derrumbes en taludes naturales.
En terrenos dedicados a la agricultura, se documentaron daños a bodegas y fisuras en tanques de almacenamiento de agua, consecuencia directa de la aparición de grietas en el suelo. Afortunadamente, no se tiene conocimiento de personas lesionadas hasta el momento.
Elementos de la Unidad Estatal de Protección Civil de Jalisco realizaron un sobrevuelo en el área del epicentro, donde constataron múltiples deslizamientos de tierra en las laderas que se extienden entre el río Atenquique y el arroyo El Seco, resultado de la inestabilidad generada por el sismo.
El material desprendido, principalmente compuesto de tobas y brechas volcánicas, sigue cayendo incluso varias horas después del evento, levantando densas nubes de polvo que reducen la visibilidad en dirección norte y oriente del Volcán de Colima.
* A los municipios y delegaciones, mantener monitoreo permanente, planear limpieza en cauces y revisar su infraestructura.
Nuestros científicos y personal operativo mantendrán monitoreo constante, con instrumentación y en campo, para seguimiento de la evolución de este fenómeno. pic.twitter.com/6UClNCoVoR
— Protección Civil JAL (@PCJalisco) April 17, 2025
Durante una inspección en el cráter del volcán, se detectó un colapso parcial en su flanco sureste, una zona caracterizada por la presencia constante de una fumarola. Además, se identificó la aparición de una pequeña cavidad con acumulación de material, la cual, aunque no representa un peligro inmediato, será objeto de monitoreo constante.