Las tensiones diplomáticas aumentaron luego de que se filtrara la posibilidad de que Estados Unidos reconozca la soberanía rusa sobre Crimea, península ucraniana anexada por Moscú en 2014
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió públicamente a Rusia cesar los ataques en Ucrania tras una ofensiva que dejó al menos 12 personas muertas y más de 90 heridas. El mensaje, dirigido al mandatario ruso Vladimir Putin, fue publicado en su red social Truth Social con la frase: “¡Vladimir, DETENTE!”.
De acuerdo con las autoridades ucranianas, durante la madrugada del jueves 24 de abril, fuerzas rusas lanzaron 70 misiles y 145 drones sobre seis regiones del país, incluyendo la capital, Kiev. En varias zonas se reportaron edificios destruidos, incendios y cuerpos sin vida en las calles.
La Unión Europea condenó la ofensiva y señaló a Rusia como el principal obstáculo para alcanzar la paz. El presidente ucraniano Volodimir Zelenski decidió interrumpir su visita a Sudáfrica para regresar a su país tras los ataques.
En Kiev, los servicios de emergencia atendieron a las víctimas durante toda la mañana. Testigos describieron escenas de pánico, con personas corriendo hacia refugios antiaéreos. Entre los testimonios recabados, una residente relató haber huido con sus hijos en medio de la noche mientras caían explosivos en la zona.
El Ministerio de Defensa ruso afirmó que el ataque se dirigió a instalaciones relacionadas con el sector militar-industrial ucraniano, utilizando armas de precisión de largo alcance.
Las tensiones diplomáticas aumentaron luego de que se filtrara la posibilidad de que Estados Unidos reconozca la soberanía rusa sobre Crimea, península ucraniana anexada por Moscú en 2014. Esta información provocó la cancelación de una reunión ministerial entre Estados Unidos, Ucrania, Francia y Reino Unido.
Zelenski declaró que Crimea sigue siendo parte de Ucrania, mientras que Trump respondió acusándolo de obstaculizar un posible acuerdo con Rusia, el cual, según el mandatario, está cerca de concretarse.
La jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, reiteró que Crimea forma parte del territorio ucraniano, respaldando la posición de Kiev frente a Moscú.