Durante este periodo, los productos chinos importados en Estados Unidos pagarán un arancel del 30%, mientras que los productos estadounidenses ingresados a China estarán sujetos a un 10%
Estados Unidos y China anunciaron un acuerdo que suspende durante 90 días la mayoría de los aranceles recíprocos impuestos en el marco de su guerra comercial. La medida, que entrará en vigor a más tardar el 14 de mayo, fue resultado de dos días de negociaciones celebradas en Ginebra entre representantes de ambos países.
El Secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y el representante de Comercio, Jamieson Greer, explicaron que la suspensión consiste en una reducción temporal de 115 puntos porcentuales en los aranceles mutuos. Durante este periodo, los productos chinos importados en Estados Unidos pagarán un arancel del 30%, mientras que los productos estadounidenses ingresados a China estarán sujetos a un 10%.
Minutos después del anuncio, la Bolsa de Hong Kong registró un alza superior al 3%, y el dólar se fortaleció frente al yen y el euro. Bessent declaró que el objetivo del acuerdo es avanzar hacia una relación comercial más equilibrada y señaló que los aranceles previos habían generado un bloqueo efectivo del intercambio entre ambos países. Por su parte, el Ministerio de Comercio de China calificó el acuerdo como un avance sustancial y lo ubicó dentro del interés económico global.
Las conversaciones contaron con la participación del vice primer ministro chino, He Lifeng, quien describió el encuentro como franco y sustancial. También se acordó establecer un mecanismo de seguimiento para continuar el diálogo comercial y económico bilateral.
La guerra comercial se intensificó a partir de abril, cuando el gobierno de Donald Trump impuso una serie de aranceles dirigidos a productos chinos. En respuesta, China aplicó gravámenes similares. Estas medidas llevaron a una acumulación de tarifas que alcanzaron hasta 245% para algunos productos estadounidenses y hasta 125% para productos chinos.
El regreso de Trump a la Casa Blanca marcó la reactivación de su estrategia arancelaria. La ronda de negociaciones en Ginebra fue la primera de alto nivel desde su retorno al poder. El propio mandatario destacó en la red Truth Social que el encuentro representó un reinicio amistoso y constructivo del diálogo.
La directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, calificó las conversaciones como un paso positivo. Según reportes, el viceprimer ministro chino acudió a las negociaciones con respaldo de datos económicos que mostraban un crecimiento del 8.1% en las exportaciones del país durante abril, impulsado por un redireccionamiento comercial hacia el sudeste asiático.
Expertos del Peterson Institute for International Economics, como Gary Hufbauer, señalaron que algunos miembros del gabinete estadounidense reconocen que China se encuentra en mejor posición para enfrentar las consecuencias de la disputa comercial.