¡Después de 12 años, volvió la gloria! Leones Negros se coronó campeón del Clausura 2025 al imponerse 5-2 en la tanda de penales ante la Jaiba Brava
La espera terminó. Luego de más de una década sin levantar un trofeo, los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara lograron conquistar el Clausura 2025 de la Liga de Expansión en una final no apta para cardiacos. El título se definió desde los once pasos, donde los tapatíos vencieron 5-4 al Tampico Madero tras un intenso empate en el Estadio Jalisco que quedará marcado en la historia del club.
Más allá del resultado, el desenlace fue una montaña rusa emocional. Con figuras como Arturo Ledesma y Jonathan Sánchez emergiendo en los momentos clave, el conjunto universitario supo sufrir y resistir para al final consagrarse ante su gente, rompiendo una sequía de 12 años sin campeonatos.
Durante los primeros 45 minutos, la UdeG mostró un planteamiento sin claridad ofensiva. El equipo no logró generar jugadas peligrosas con consistencia y su única aproximación importante ocurrió al minuto 33, cuando Bryan Flores anotó un gol que fue invalidado por un claro fuera de lugar.
Por su parte, el Tampico Madero lució más cómodo sobre el terreno de juego. Con el control del ritmo y mayor presencia ofensiva, los dirigidos por Marco Ruíz estuvieron más cerca de abrir el marcador, pero su falta de eficacia frente al arco permitió que los Leones Negros siguieran con vida.
Para la segunda parte, el conjunto tapatío mostró una cara distinta. Salió con mayor determinación al ataque, pero sus intentos no fueron suficientes para vulnerar a una defensa bien plantada de la Jaiba Brava. Jugadores clave como Jesús Ocejo, Edson Torres, Carlos Fierro y Alejandro Organista no lograron pesar en el desarrollo del juego.
Cuando el cronómetro marcaba el minuto 94 y el partido parecía escurrirse, Arturo Ledesma apareció con un remate crucial que igualó el marcador. Su gol llevó el encuentro al alargue y reavivó la ilusión de los aficionados que abarrotaron el Jalisco.
Durante los tiempos extra, ambos equipos mostraron desgaste físico y mental. Aunque hubo oportunidades, la más clara la tuvo Jesús Escoboza, quien erró increíblemente un mano a mano frente a Felipe López, desperdiciando la chance de evitar los penales.
En la tanda definitiva, los primeros ocho disparos fueron ejecutados con gran calidad. La diferencia llegó cuando Gerardo Ruíz, arquero de Tampico, voló su disparo por encima del arco. Finalmente, Jonathan Sánchez tomó el balón, lo acomodó con temple y anotó el penal decisivo que selló el campeonato para los Leones Negros, devolviendo la gloria a la institución.