Sin duda alguna, la jornada del domingo nos deja varias lecciones. La primera es que no se debe subestimar la inteligencia de las y los ciudadanos; cuando se creía que sería una fiesta democrática porque la gente quería elegir la conformación del Poder Judicial, la realidad quedó demostrada: las personas que acudieron a votar no tenían claro por quién iban a votar, a pesar de los famosos acordeones que iban y venían, dejando claro que ya había ganadores y ganadoras y aun no iniciaba la jornada de votación.
Además de todo lo vivido y lo polémico que fue el llamado a las urnas de una mal llamada reforma al Poder Judicial, donde el régimen impuso a los ministros, magistrados y jueces con una pírrica participación del 13%, el domingo pasado paralelamente se vivió un jornada electoral donde a manera de contraste sí hubo interés en participar en las elecciones para presidentas y presidentes municipales, en Veracruz voto el 49.98% y en Durango el 44.72% de la ciudadanía, lo que demostró que las personas sí tienen presente cuáles son los temas donde verdaderamente su voto vale.
Este fin de semana, Movimiento Ciudadano se consolidó como la segunda fuerza política de Veracruz y se convirtió en la segunda fuerza en 38 municipios de ambos estados. Es segunda fuerza en Xalapa, capital de Veracruz, y en Gómez Palacio, la segunda ciudad más importante de Durango, lo que nos lleva a preguntarnos: ¿la disputa en 2027 se dará entre Movimiento Ciudadano y Morena?
Lo vivido en las elecciones es el resultado de un trabajo colectivo. El partido naranja no sigue la lógica del caudillismo ni de personajes individuales; los datos de las encuestas de salida confirman que somos la primera fuerza política entre las juventudes. Por otro lado, está el entendimiento de la importancia de las dinámicas locales y el compromiso con las causas y propuestas con alternativas. El mapa político está cambiando, las mexicanas y los mexicanos ya no quieren a la vieja política, Movimiento Ciudadano se posiciona como el cambio.
Porque cuando la política se hace con causas, con equipo y con honestidad, los resultados llegan. Lo que se hizo en Durango y Veracruz, es un triunfo relevante; la fuerza naranja que inició en el municipio de Tlajomulco hoy representa una opción ganadora en otros estados de la república.
Estos resultados son un acicate al régimen que demuestra que no tienen todas las canicas en la bolsa, como se decía, asegurando que la operación de 24 gobernadores y de la mayoría en ambas cámaras sería suficiente. Hoy le tocará legitimar a esa conformación que hicieron en el Poder Judicial para que dé respuesta a la brecha de desigualdad que existe entre los operadores de justicia y lo justiciable.