“Si escupen, nosotros golpearemos”, resume Donald Trump, quien desplegó la guardia nacional y movilizará a los Marines en respuesta a los disturbios en Los Ángeles contra sus redadas migratorias, en una muestra de autoridad presidencial que sus críticos consideran desmedida.
Desde hace tres días algunas zonas de Los Ángeles son escenario de enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas del orden, al margen de movilizaciones contra la política radical antimigración del gobierno federal.
El presidente republicano de 78 años ordenó enviar a 2 mil militares de la guardia nacional, un cuerpo de reservistas, a esta ciudad californiana.
“Es una escalada innecesaria y un abuso de poder”, denunció en un comunicado Hina Shamsi, del influyente grupo de derechos civiles ACLU.
El lunes Trump dio un paso más. Según un funcionario que pidió mantener el anonimato enviará a 700 miembros del famoso Cuerpo de Marines a Los Ángeles para proteger a funcionarios y edificios federales.
Desde hace varios años, como presidente o candidato, Trump habla de utilizar al ejército para operaciones policiales. En su primer mandato en la Casa Blanca (2017-2021) no lo hizo.