Apps de citas: el nuevo riesgo silencioso en Puerto Vallarta

Puerto Vallarta y Nuevo Vallarta, reconocidos destinos turísticos en la costa del Pacífico mexicano, enfrentan una preocupante amenaza que ha encendido alertas diplomáticas y pone en tela de juicio la respuesta local: el uso de aplicaciones de citas como herramienta para cometer secuestros y extorsiones.

En lo que va del 2025, la Fiscalía de Jalisco ha confirmado tres casos oficiales de secuestros vinculados al uso de apps como Tinder, Bumble o Grindr, en los que las víctimas, principalmente turistas estadounidenses, fueron contactadas, citadas en sitios públicos y posteriormente llevadas a lugares aislados donde fueron retenidas y obligadas a entregar grandes sumas de dinero.

Uno de los casos más recientes, ocurrido en mayo, involucró el secuestro exprés de un ciudadano estadounidense en un condominio privado de Puerto Vallarta. Gracias a la intervención de autoridades locales y el FBI, se logró el rescate de la víctima y la detención de un sujeto identificado como Edwin Aran “N”, hoy vinculado a proceso por secuestro agravado.

A diferencia de Jalisco, la Fiscalía de Nayarit no ha emitido cifras oficiales sobre casos en Nuevo Vallarta, pese a que este destino también figura en las advertencias consulares. Fuentes extraoficiales indican que la falta de denuncias se debe al miedo de las víctimas a represalias, la desconfianza institucional y el desconocimiento del proceso legal, factores que generan una cifra negra alarmante.

Ante la pasividad local, ha sido el gobierno de Estados Unidos el que ha encendido la alarma. A través de su consulado en Guadalajara, se emitió una alerta de seguridad recomendando a sus ciudadanos ejercer extrema precaución al utilizar apps de citas en destinos turísticos de Jalisco y Nayarit, tras documentar múltiples reportes de secuestros y extorsión, incluso en casos no denunciados formalmente ante las fiscalías estatales.

“Las víctimas conocieron a sus agresores mediante aplicaciones móviles y fueron privadas de su libertad en citas pactadas”, indicó el comunicado oficial. “Se recomienda a los viajeros no compartir información sensible, evitar encuentros privados y mantener informados a familiares sobre sus planes”.

Estos hechos se suman a al menos siete casos de secuestro virtual en el Estado de Jalisco durante el mismo periodo, una modalidad de extorsión telefónica que continúa en expansión, especialmente en zonas turísticas y con población extranjera vulnerable, principalmente playas o lugares poco frecuentados.

La falta de una respuesta sólida, sistemática y preventiva por parte de las autoridades locales genera una preocupante brecha de impunidad, en la que el crimen organizado aprovecha nuevas tecnologías para sofisticar sus métodos y evadir la acción judicial.
Las apps de citas, pensadas para conectar a personas, se han transformado en armas digitales para la comisión de delitos complejos que combinan tecnología, manipulación psicológica y estructuras criminales organizadas. Mientras tanto, el silencio institucional y el subregistro de casos en lugares como Vallarta deja a cientos de personas, locales y extranjeras en riesgo.

La seguridad no puede seguir siendo selectiva ni silenciosa, porque cuando la justicia calla, la impunidad habla más fuerte.