TRIsteza nacional

La Selección Mexicana de Javier Aguirre está muy lejos de ser competitiva. Después de lo mostrado ante la selección de República Dominicana, nos debe dar miedo ser anfitriones del Mundial del 2026. El combinado nacional está lejos de un buen nivel, de ser guerreros, de ser una selección, de ser un equipo y de estar bien dirigidos.

El típico verso que “Centroamérica ha crecido”, “las selecciones caribeñas han mejorado mucho”, es más. Para no ir tan lejos, Aguirre en la conferencia del viernes ya estaba abriendo el paraguas diciendo que “han crecido mucho en 20 años”. ¿Por qué en vez de alabar lo que hacen otras selecciones no hablamos de lo que hemos dejado de hacer en nuestro país?
La realidad es que el nivel futbolístico en nuestro país y por en ende, en la Selección, se han estancado en el mejor de los casos, porque en la realidad yo me atrevería a asegurar que hemos decrecido. Es cierto, y no está mal reconocer que otras selecciones estén creciendo, han mejorado su técnica y a sus jugadores los exportan a otros países, para que jueguen en la segunda o tercera división de algún territorio europeo.

Pero todo eso hace que crezcan, que tengan hambre, que se rocen a nivel internacional y que vayan agarrando bagaje para competir en otros niveles, porque buscan no seguir en la misma mediocridad y conformismo.

Acá con los nuestros, tienen todas las comodidades, empezando por los sueldos, siguiendo por las prestaciones y atenciones que les dan, pero es evidente la falta de profesionalismo de algunos futbolistas y lo más impactante: la falta de ambición deportiva de los dueños.

Mientras en la Liga Mexicana y la Femexfut se siga ponderando el tema económico sobre el deportivo, seguiremos hundiéndonos, pues la falta de ascenso y descenso es solo la punta del iceberg en la mediocridad que está consumiendo al futbol mexicano. Ya vimos al Tricolor sufrir y defenderse como “gato patas arriba” ante Dominicana. Espero, como aficionado, no ver igual a los futbolistas ante Surinam. Porque ese sí será el acabose del “Vasco” y de todo el verso ese, de que estamos pensando en el Mundial y esto sólo es preparación.