El Real Madrid igualó 1-1 con el Al Hilal saudí este miércoles en Miami en su estreno en el Mundial de Clubes, en partido del Grupo G, en una tarde sin el “rock and roll” prometido por Xabi Alonso y que terminó con un penal fallado por Federico Valverde.
El equipo blanco, uno de los grandes favoritos de la competición, se adelantó con un gol del canterano Gonzalo García-Torres en el minuto 34, pero su rival logró empatar con un disparo desde los once pasos marcado por Ruben Neves (41).
Privado del delantero Kylian Mbappé, afectado por un proceso febril, el gigante español empezó con mal pie su nueva etapa bajo las órdenes de Xabi Alonso.
De inicio, la afición blanca, muy mayoritaria en las gradas del Hard Rock Stadium, esperaba seguramente un monólogo del Madrid. Pero en la primera media hora el protagonista absoluto fue el Al Hilal.
Los saudíes movían bien la pelota, con ritmo, y percutían una y otra vez por las bandas ante un Real demasiado pasivo.
Por la izquierda, el extremo Salem Al-Dawsari encontró una vía frente al lateral derecho Trent Alexander-Arnold, nuevo fichaje blanco, y la explotó a fondo.
Un mal tiro suyo se convirtió en una asistencia perfecta para Marcos Leonardo, pero el remate del delantero se fue rozando el palo.
Enfrente, muy poco de un Real Madrid sin ideas, superado físicamente en el calor sofocante de Miami.
Los merengues tocaban lentamente de banda a banda, sin peligro.
Y el Al Hilal, muy a gusto en la cancha, seguía a lo suyo con un Al-Dawsari muy activo, pero demasiado impreciso en la definición.
La pausa de hidratación le vino bien al Madrid. De regreso al campo, García-Torres inició un rápido contragolpe y se encargó de rematarlo tras una buena asistencia de Vinícius. Un castigo cruel para los saudíes.
El Madrid se encargó, sin embargo, de regalarle el empate.
En una jugada sin peligro, el central Raúl Asencio agarró al delantero Marcos Leonardo por la camiseta en el área, y el árbitro lo castigó con un penalti bien ejecutado por Neves.
Antes del descanso, Al-Dawsari, otra vez él, desaprovechó otra gran ocasión después de una buena internada por la izquierda.