En México hay 33 millones 374 mil niñas y niños de entre 0 y 14 años. A lo largo de los años, las infancias han sido vistas como seres que todavía no entienden o no tienen edad para opinar, decidir o participar. Esta visión adultocentrista limita su desarrollo, silencia sus voces y perpetúa los entornos de violencia, pobreza y discriminación. Paradójicamente siempre se dice que son el futuro del país.
Si volteamos a ver la historia nacional, veremos una falta de capítulos protagonizados por las infancias, no así por grupos como las mujeres, las juventudes, los movimientos laboristas o partidistas; sin embargo, aunque las niñas y niños son el centro de graves problemáticas, no figuran en el mapa, y todavía son pocos los esfuerzos que se realizan para incluirles en la vida de México como verdaderos sujetos de derecho y así empoderarles.
Empoderar no se trata de dar más poder, sino de reconocer el poder que ya tienen, es decir, no es una cuestión de verticalidad, sino de horizontalidad. En otras palabras, empoderar es respetar el derecho a la expresión, a la participación y al ser tomados en cuenta en las decisiones que nos afectan o benefician. ¿Qué tanto tendrán que decirnos las niñas y niños acerca de sus escuelas, sus comunidades, los gobiernos, sus familias y de sí mismos?
Estas reflexiones nos llevaron a preguntarnos qué es lo que podemos hacer como partido político en favor de las infancias. Distintos organismos internacionales, como la UNICEF, han detectado que cuando las niñas y niños son escuchados, protegidos y promovidos como sujetos de derecho, se fortalece la vida pública de los países, dando como resultado ciudadanos críticos y responsables, así como entornos de paz. Fue así como nació el programa PRI Kids.
Se trata de un programa que busca cambiar las reglas del juego y ver a las infancias no como problemas que hay que atender simplemente, sino como verdaderos agentes de cambio. Aquí se les enseña mediante el juego acerca del medio ambiente, la igualdad, el internet, las redes sociales, la participación ciudadana y los derechos de las niñas y los niños, todo sin una perspectiva o ideología partidista. En México, somos el único partido que cuenta con un centro de empoderamiento infantil, y por segundo año consecutivo hemos lanzado la convocatoria para una nueva edición.
Ante las amenazas actuales de la violencia, la precariedad, el abuso sexual, el bullying, el cambio climático y el abandono institucional, el hecho de empoderar a las infancias se convierte en la única alternativa para romper los ciclos de injusticias que se han arrastrado por generaciones y para construir desde sus cimientos una sociedad más justa, más libre y más humana. Mantener en silencio a las y los futuros líderes de este país, simplemente no es opción.
Si tienes menores en casa y te interesa saber más acerca de PRI Kids, escribe un mensaje a las redes sociales del partido y recibe toda la información.