Las medidas incluyen el bloqueo de bienes y cuentas en territorio estadounidense, además de la prohibición de transacciones financieras con estas personas y compañías
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a 13 empresas y cuatro ciudadanos mexicanos vinculados con esquemas de fraude en tiempos compartidos en Puerto Vallarta, acusados de tener relación con el grupo criminal que opera principalmente en Jalisco. Las medidas incluyen el bloqueo de bienes y cuentas en territorio estadounidense, además de la prohibición de transacciones financieras con estas personas y compañías.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) señaló que desde 2012 el grupo criminal controla las estafas relacionadas con tiempos compartidos en ese destino turístico. El esquema afecta principalmente a ciudadanos estadounidenses, en particular a personas mayores, quienes son contactadas mediante llamadas o correos electrónicos. Los operadores, que se hacen pasar por corredores, abogados o representantes de ventas, ofrecen servicios de reventa, realquiler o inversión en inmuebles. A las víctimas se les solicita el pago de “cuotas” o “impuestos” por adelantado con la promesa de recibir recursos posteriores, los cuales nunca se entregan.
El fraude consiste en pedir transferencias internacionales a cuentas en bancos mexicanos. En algunos casos, los estafadores se hacen pasar por bufetes de abogados o incluso por funcionarios públicos, solicitando pagos adicionales bajo la amenaza de sanciones o procesos legales. De acuerdo con el Tesoro, la información de los propietarios de tiempos compartidos se obtiene a través de cómplices dentro de complejos turísticos.
Las sanciones alcanzan a Julio César Montero Pinzón, Carlos Andrés Rivera Varela, Francisco Javier Gudiño Haro y Michael Ibarra Díaz Jr., este último identificado como empresario turístico en Puerto Vallarta. La red empresarial vinculada a Ibarra incluye compañías como Akali Realtors, Sunmex Travel, Inmobiliaria Integral del Puerto y KVY Bucerías, además de agencias de viajes y firmas inmobiliarias.
El Tesoro advirtió que el grupo criminal complementa sus ingresos del narcotráfico con actividades como el robo de combustible. Además, exhortó a los ciudadanos estadounidenses a verificar cualquier oferta no solicitada relacionada con la compra o renta de inmuebles vacacionales en México. “Si parece demasiado buena para ser verdad, probablemente lo sea”, señaló la dependencia.
El esquema de tiempo compartido consiste en que varias personas comparten el uso de un inmueble durante periodos específicos a cambio de pagos y cuotas de mantenimiento. En México, este modelo ha sido aprovechado por la delincuencia organizada para defraudar a turistas y generar ingresos ilícitos.