Nuestra presidenta Verónica Delgadillo está haciendo historia al ser la primera mujer electa para gobernar la capital tapatía, pero también es cierto que ella, en reiteradas ocasiones, ha dicho que para hacer un buen trabajo necesita hacer equipo con los hombres, y hay uno en particular que ha demostrado su amor por la ciudad, que sentó las bases para muchos proyectos que hoy son realidad y que desde el Gobierno del Estado, hoy sigue apoyando para que la Perla Tapatía siga siendo una de las mejores metrópolis en el mundo.
Pablo Lemus Navarro, ex presidente municipal de Zapopan y de Guadalajara, hoy gobernador de Jalisco, dijo el lunes pasado que respaldaría todos los proyectos para la capital tapatía y que camina de la mano con nuestra presidenta porque se lo merecen la ciudad y el Estado.
El apoyo es evidente y hay, incluso, quienes se ponen celosos del amor que tiene nuestro gobernador por Guadalajara, porque el Ejecutivo está invirtiendo en obras tanto en el Centro Histórico como en la Glorieta Minerva, mismas que así como él mismo señaló, si bien la excusa es el Mundial de Futbol FIFA 2026, serán un legado para todas y todos los tapatíos.
Ese ha sido el objetivo siempre: que las y los ciudadanos tengan una ciudad en óptimas condiciones, con espacios para que las familias puedan gozar apropiándose de los mismos, como sucedió con el Paseo Alcalde que podemos ver por las tardes, entre semana y no se diga los fines de semana, lleno de gente tanto local como turistas que vienen a disfrutar.
No podemos entender la ciudad sin el trabajo de quienes han precedido a nuestra presidenta, porque la transformación de Guadalajara es producto, no de un día o una administración, sino del ladrillo que cada uno colocamos para seguir construyendo una mejor capital.
Y lo que es aún más importante, darle vida al corazón tapatío, seguir haciendo que sea una ciudad habitable, ponerla guapa para vivir, pero también que sea atractiva para invertir en el Centro de la Zona Metropolitana.
Por eso, en estos días en los que se cumple un año de que inició el Gobierno de Guadalajara con la primera mujer presidenta, es buen momento para reconocer a quienes hicieron lo que debían hacer, como Pablo Lemus, cuyo trabajo nos ayudó a que, al inicio de esta gestión, se pudiera tomar la decisión más importante, quizás, de toda la administración, que fue la de no renovar la concesión con la empresa Caabsa para la recolección de basura.
Y aunque la responsabilidad del gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, es trabajar para los 125 municipios de la Entidad como él mismo lo dijo, sin su apoyo y sin sus aportaciones no podríamos tener los resultados que hoy tenemos, por eso hoy le decimos: gracias por tanto amor por Guadalajara.