De acuerdo con versiones de testigos, los encapuchados pretendían instalar un plantón al interior del centro universitario, utilizando mobiliario del plantel. Sin embargo, fueron confrontados por alumnos que, al parecer, ya se encontraban organizados para impedir la toma. La situación escaló hasta convertirse en una gresca que obligó al uso de gas lacrimógeno para dispersar a los involucrados. No se reportaron personas lesionadas.
Por segundo día consecutivo, se registraron hechos violentos en instalaciones de la Universidad de Guadalajara (UdeG). La tarde de este jueves, un grupo de personas encapuchadas intentó tomar el edificio del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), lo que derivó en un enfrentamiento con estudiantes que se opusieron a la acción.
De acuerdo con versiones de testigos, los encapuchados pretendían instalar un plantón al interior del centro universitario, utilizando mobiliario del plantel. Sin embargo, fueron confrontados por alumnos que, al parecer, ya se encontraban organizados para impedir la toma. La situación escaló hasta convertirse en una gresca que obligó al uso de gas lacrimógeno para dispersar a los involucrados. No se reportaron personas lesionadas.
Los manifestantes exigen la suspensión del proceso electoral de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) y una reestructuración del Consejo General Universitario, con el fin de desvincularlo de grupos políticos que, aseguran, influyen en su conformación.
Tras los hechos, la Universidad de Guadalajara emitió un comunicado en el que condenó “enérgicamente” los actos de violencia y recalcó que “la violencia nunca será un camino legítimo para expresar diferencias”. La institución agregó que dará seguimiento a lo ocurrido y reiteró su compromiso con la seguridad de la comunidad universitaria.
La casa de estudios hizo un llamado a todas las partes a privilegiar el diálogo como vía para resolver cualquier diferencia y a mantener un ambiente de respeto dentro de la vida académica.