Jalisco defiende lo suyo
No puedo quedarme callada cuando la Federación desprecia, una vez más, a Jalisco. Hoy, la indignación de nuestras familias y de nuestros sectores productivos frente al estado de las carreteras federales resume una verdad contundente: el Gobierno emanado de Morena ha decidido darle la espalda a uno de los motores económicos del país, dejándonos en el limbo vial mientras duplicamos esfuerzos para salir adelante.
Nuestro gobernador, Pablo Lemus, ha sido claro, firme y valiente. Desde el primer día ha exigido que la Federación intervenga de inmediato ante el deterioro de las vías federales. Carreteras en condiciones intransitables, auténticos caminos de cráteres, que además de lastimar nuestra dignidad como Estado, ponen en riesgo a las familias, estudiantes, comerciantes y transportistas que transitan a diario. A pesar de gestiones constantes con la Secretaría de Infraestructura, la respuesta federal siempre ha sido una: evasiva y falta de compromiso. No hay fecha, no hay recursos, no hay voluntad.
¿Y cuál es la respuesta presupuestal? Para 2025, la Federación asignó a Jalisco apenas una migaja: 400 millones de pesos para las carreteras federales, cuando la necesidad es de al menos 12 mil millones solo para devolver condiciones dignas a las principales rutas. Se trata de menos del 4% de lo requerido. El resto, nos dicen desde Ciudad de México, lo busquemos con paciencia en “futuras gestiones” o quizá en los sueños guajiros de la burocracia centralista. La realidad es innegable: Jalisco está siendo castigado presupuestalmente y lo está pagando con vidas, competitividad y oportunidades.
Sin embargo, en lugar de resignarse, nuestro gobernador Lemus ha asumido una postura que merece nuestro respaldo: invertir recursos estatales en una red carretera sin precedentes. En menos de 14 meses —se ha comprometido públicamente—, nuestro Estado tendrá toda la red carretera estatal en condiciones óptimas de mantenimiento con una inversión superior a los 24 mil millones de pesos. La estrategia estatal contempla 207 frentes de obra, 5 mil 200 empleos directos en la conservación y rehabilitación, y nuevas rutas que impulsarán la conectividad y la inclusión de comunidades históricamente marginadas. Para cada kilómetro de carretera recuperada, hay una historia de progreso, esperanza y defensa de lo nuestro.
Hoy, lo que está en juego no son solo números; está en riesgo la integridad y la vida de quienes transitan las vías. Los accidentes y percances no distinguen nivel socioeconómico ni ocupación. No invertir en carreteras federales es condenar a quienes trabajan, estudian, transportan bienes y producen riqueza, a transitar caminos peligrosos mientras la Federación se deslinda.
El mensaje de Jalisco debe ser claro: nuestra gente no es menor, ni merece limosnas ni castigos fiscales. Seguiremos exigiendo trato digno, recursos justos y corresponsabilidad para no permitir que la seguridad vial quede rehén de cálculos políticos. Mientras tanto, desde Movimiento Ciudadano, todo el respaldo al gobernador Lemus y a quienes representan una agenda de exigencia, gestión y resultados.
Porque defender a Jalisco es defender la vida, el desarrollo y la dignidad de las y los jaliscienses, hoy y siempre.
