Frente a este futuro planteado por el blanquiazul vale la pena reflexionar sobre el porvenir que se le dibuja al PRI, que en la última elección federal fue de la mano del PAN y el extinto PRD. Tras la derrota electoral frente a Morena y sus aliados, el partido del sol azteca fue enviado al rincón de la historia, y tomando en cuenta la baja votación del Revolucionario Institucional, que les ocasionó no ganar sin coalición ningún distrito federal, el amenazante abandono del PAN pondría en serios predicamentos al tricolor, no solo para obtener algunos triunfos en 2027, sino para mantener el registro.