Varios choferes optaron por no ingresar a las zonas de ascenso y descenso para evitar sanciones

La operación de vehículos de plataformas como Uber en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara sigue sin claridad, luego de declaraciones contradictorias entre autoridades estatales y federales.
Aunque el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus Navarro, informó que los conductores de Uber pueden recoger y dejar pasajeros en los aeropuertos de Guadalajara y Puerto Vallarta gracias a una suspensión definitiva otorgada por un juzgado federal, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) reiteró que estas empresas no cuentan con autorización para operar en terminales aéreas del país.
Según el periódico Mural, durante la mañana del jueves, en un recorrido realizado entre las 10:00 y las 11:00 horas, el movimiento de taxis en el aeropuerto tapatío transcurrió con normalidad, pero sin presencia visible de conductores de Uber. Varios choferes optaron por no ingresar a las zonas de ascenso y descenso para evitar sanciones.

Uno de ellos, identificado como Juan, explicó que hace un mes fue multado con 57 mil pesos y su vehículo fue retenido por más de 15 días tras un operativo de la Guardia Nacional. “No vale la pena arriesgar el carro por una multa o que nos lo retengan. Nadie nos ha mostrado ese amparo, y si la SICT dice que no hay permiso, mejor no entraremos”, comentó.
La presencia de elementos de la Guardia Nacional fue más visible que en días anteriores, mientras los llamados informales para ofrecer viajes desde la terminal se realizaban con discreción.
El gobernador Lemus reiteró que el acuerdo alcanzado con la Guardia Nacional busca respetar la resolución judicial, que permitiría a los usuarios elegir libremente su medio de transporte. Sin embargo, la SICT aclaró que la suspensión no equivale a un permiso, sino a una medida para garantizar que los operativos se realicen conforme a la ley.
Ante la falta de certeza legal, los conductores de plataformas decidieron mantenerse al margen de las zonas del aeropuerto, mientras el conflicto entre los gobiernos estatal y federal continúa sin una definición clara.