La seguridad es, sin duda, uno de los temas que más nos exige reflexión, diálogo y compromiso. En estos tiempos complejos, hablar de seguridad no es solo referirnos a la ausencia de violencia, sino a la construcción activa de entornos donde todas las personas puedan vivir con dignidad, libertad y paz. Por eso, desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco, realizamos e inauguramos este martes el primer Congreso Internacional “Seguridad y Derechos Humanos”.
Garantizar la seguridad ciudadana es una de las tareas más urgentes y prioritarias de nuestros días. Sin ella, el desarrollo y el bienestar de nuestras comunidades simplemente no son posibles. Pero este reto no se resuelve con medidas aisladas ni con discursos; requiere una visión integral que incorpore elementos esenciales: protocolos claros, incorporación de tecnología, capacitación constante, respaldo ciudadano y, sobre todo, un trato digno hacia cada persona.
Estoy convencida de que la innovación y los avances tecnológicos deben ser aliados para erradicar los rezagos que por años han frenado la justicia y la paz. No obstante, también sé que ninguna estrategia será efectiva si no se cimienta sobre el valor fundamental de la persona humana.
Este congreso, “Seguridad y Derechos Humanos”, representa una excelente oportunidad para generar propuestas concretas y soluciones efectivas. Las y los expertos participantes traen consigo experiencias y conocimientos valiosos que sin duda enriquecerán el debate. Pero también sé que el éxito de este encuentro depende de la participación activa de todas y todos: de quienes cuestionan, proponen y buscan transformar la realidad desde su ámbito de acción.
La seguridad, entendida desde un enfoque de derechos humanos, es una tarea colectiva. Implica reconocer que cada decisión, cada política y cada acción institucional impacta la vida de las personas. Por eso, más allá de los foros y los discursos, debemos comprometernos a hacer de la seguridad un proyecto humano, incluyente y sostenible.
Desde la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco seguiremos impulsando este tipo de espacios que nos permiten dialogar, aprender y, sobre todo, construir juntos un mejor Jalisco y un mejor país. La seguridad y los derechos humanos no son metas opuestas, sino caminos que deben recorrerse de la mano.
Porque solo cuando la seguridad se entienda desde la dignidad, la justicia y el respeto, podremos hablar verdaderamente de paz.