En México y otras regiones de América Latina, las autoridades anticipan fluctuaciones menores en el suministro eléctrico, interferencias en comunicaciones de alta frecuencia y alteraciones temporales en dispositivos de posicionamiento.

Este martes 11 de noviembre, el Sol emitió una potente llamarada solar de clase X5.1, considerada el fenómeno más fuerte registrado en lo que va de 2025. El estallido fue detectado por los satélites de observación de la NASA y el Centro de Predicción del Clima Espacial (SWPC) de Estados Unidos, que reportaron un pico de radiación electromagnética con capacidad para generar apagones y fallas temporales en sistemas de comunicación.
Las llamaradas solares clasificadas con la letra X representan los eventos de mayor energía en el espectro solar, y una magnitud de 5.1 indica un estallido particularmente extremo.
Debido a su intensidad, este tipo de fenómenos puede alterar la ionósfera terrestre, provocando interrupciones en señales de radio, afectaciones en redes eléctricas y riesgos operativos para satélites y equipos de navegación como GPS.
De acuerdo con información del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el evento estuvo acompañado por una eyección de masa coronal que podría impactar la Tierra entre el 12 y 13 de noviembre, lo que incrementa la probabilidad de una tormenta geomagnética moderada o fuerte en los próximos días.
En México y otras regiones de América Latina, las autoridades anticipan fluctuaciones menores en el suministro eléctrico, interferencias en comunicaciones de alta frecuencia y alteraciones temporales en dispositivos de posicionamiento.
Además, si las condiciones atmosféricas lo permiten, existe la posibilidad de observar auroras en zonas del norte del país.
Este episodio ocurre en pleno máximo solar, etapa del ciclo de 11 años en la que el Sol incrementa la actividad de manchas y explosiones en su superficie. Aunque 2025 ha mostrado un aumento notable de erupciones, ninguna había alcanzado la intensidad de la llamarada X5.1 registrada este martes.