Gen Z: Trasladan a Puente Grande a detenidos tras protestas
De acuerdo con la información oficial, se les imputa el delito de daño a monumentos arqueológicos, artísticos e históricos
Cuarenta personas detenidas durante la marcha del movimiento conocido como “Generación Z”, realizada el sábado en el Centro Histórico de Guadalajara, fueron trasladadas al penal de Puente Grande. De acuerdo con la información oficial, se les imputa el delito de daño a monumentos arqueológicos, artísticos e históricos. Se trata de 35 hombres y cinco mujeres, quienes quedaron a disposición de un juez de control y oralidad del complejo carcelario. Su audiencia está programada para este martes.
La Fiscalía del Estado informó que siete de las personas detenidas enfrentan cargos adicionales. Tres de ellas fueron acusadas de daño en inmuebles y otras cuatro por lesiones y delitos cometidos contra representantes de la autoridad. Además, cuatro adolescentes que también fueron detenidos quedaron en un albergue y serán presentados mañana ante un juez especializado en justicia para menores.
La dependencia señaló que el traslado al penal, la puesta a disposición ante la autoridad jurisdiccional y el internamiento de los adolescentes se realizaron bajo acompañamiento de la Vicefiscalía en Derechos Humanos.
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El secretario general de Gobierno, Salvador Zamora Zamora, explicó que se trabaja con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para cuantificar daños en edificios públicos. Indicó que puertas, ventanas, mobiliario y una parte del museo ubicado en Palacio de Gobierno registraron afectaciones, además de intentos de incendio que fueron controlados.
Zamora afirmó que no hubo intención de reprimir la manifestación y señaló que los protocolos de resistencia se activaron cuando un grupo ingresó a Palacio de Gobierno y comenzó a causar daños en el inmueble.
Paralelamente, familiares y organizaciones civiles denunciaron detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza. El Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad) señaló que, con base en testimonios y videos, se observan posibles violaciones a derechos humanos, entre ellas detenciones sin causa, agresiones físicas y ausencia de protocolos claros para el manejo de protestas.
