La decisión, explicó, responde a las dificultades técnicas y administrativas para ejecutar el cobro de manera efectiva

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó que el impuesto del 8 por ciento a los videojuegos con contenido violento, contemplado en la Ley de Ingresos para el ejercicio fiscal 2026, no será aplicado. La decisión, explicó, responde a las dificultades técnicas y administrativas para ejecutar el cobro de manera efectiva.
Durante su conferencia matutina de este martes, la mandataria señaló que el principal obstáculo para aplicar el gravamen es la imposibilidad de establecer criterios claros que permitan diferenciar con precisión qué videojuegos pueden considerarse violentos y cuáles no. Asimismo, indicó que no existe una autoridad o dependencia definida que tenga la facultad de clasificar oficialmente el contenido de los videojuegos, lo que complicaría aún más la implementación del impuesto.
Sheinbaum explicó que, aunque solicitó que el gravamen fuera retirado del proyecto de Ley de Ingresos aprobado por el Congreso, finalmente no se eliminó del documento. Ante ese escenario, el Ejecutivo federal tomó la determinación de no cobrar el impuesto a partir de 2026. La presidenta reiteró que la falta de mecanismos claros para su aplicación haría inviable su ejecución y podría generar controversias legales y administrativas.
🔴 La presidenta Claudia Sheinbaum (@Claudiashein) informó que el impuesto del 8 % a los videojuegos considerados “violentos” no será aplicado debido a complicaciones. pic.twitter.com/jQ4skj7aSL
— quiero tv (@quierotv_gdl) December 23, 2025
La titular del Ejecutivo enmarcó el tema dentro de una discusión más amplia sobre salud mental, adicciones y consumo de contenidos digitales, especialmente entre jóvenes y adolescentes. Señaló que el uso de videojuegos, en particular aquellos que se desarrollan en línea, ha aumentado en los últimos años y puede generar patrones de consumo problemáticos, aunque reconoció que también existen aspectos positivos asociados a esta actividad.
Como alternativa al esquema fiscal, el Gobierno de México implementará campañas informativas y preventivas dirigidas a niñas, niños y adolescentes, con el objetivo de generar conciencia sobre el uso responsable de los videojuegos y los posibles efectos del consumo prolongado de contenidos con violencia digital. Estas acciones formarán parte de una estrategia de comunicación enfocada en la construcción de la paz y la prevención de adicciones.
El impuesto originalmente planteado establecía un incremento del 8 por ciento en el precio de videojuegos con contenido violento extremo, tanto en formato físico como digital. La medida había generado reacciones entre consumidores y sectores de la industria. Con la decisión anunciada, el gravamen no será aplicado y el Gobierno federal centrará sus esfuerzos en medidas preventivas y de orientación social.